Dra. Mª Antonieta Pérez por investigación en Alto Biobío: Estamos al debe en salud odontológica intercultural

Entre abril de 2021 y mayo de 2022, cerca de 70 niños y niñas de entre 5 a 7 años del Alto Biobío participaron en la investigación "Modelo integral de evaluación de factores de riesgo para la salud oral de pre-escolares de comunidades pehuenches como apoyo al diagnóstico clínico-dental".

El proyecto, que contó con el patrocinio del Colegio de Cirujano Dentistas de Chile, es uno de los ocho que recibió el apoyo de los Fondos de Investigación del Programa de Interculturalidad UCO 1995, de la Vicerrectoría de Relaciones Institucionales y Vinculación con el Medio (VRIM), de la Universidad de Concepción.

La investigación se encuentra en su etapa final y se espera que sus resultados sean presentados en el Congreso de Odontopediatría de octubre de 2022, y publicado en alguna revista de la especialidad.

Para conocer adelantos de los resultados, conversamos con la odontopediatra María Antonieta Pérez Flores, investigadora a cargo del proyecto. 

¿Cómo nace la idea de centrar la investigación en preescolares en Alto Biobío con enfoque intercultural? 

Esta fue una respuesta a un concurso que llamó la Universidad de Concepción, aunque desde nuestro equipo la idea nace desde mucho antes. Yo he venido trabajando con algunos alumnos ayudantes desde hace un par de años y uno de ellos (Edson Vivanco, ahora cirujano dentista titulado) se interesó por la salud con enfoque intercultural.

En ese sentido, nosotros reconocemos que como profesión estábamos un poco al debe con el tema, ya que en medicina se ha hecho bastante más, pero los odontólogos no le hemos hincado el diente como nos hubiera gustado, puesto que la mayoría de las veces que hemos hecho algo es desde el punto de vista asistencialista, es decir, ir a cubrir las necesidades que yo detecto, pero no desde la población. Creo que ese fue uno de los enfoques más bonitos que tuvo este proyecto.

Entonces, el proyecto parte por la inquietud de ver cómo podíamos aportar sin ser entes solucionadores de problemas, sino que identificadores y trabajando con la comunidad

¿Cuál es el objetivo del proyecto?

Nosotros queríamos ver si es que en el modelo de predicción o riesgo de caries -que es una enfermedad pandémica mundial y que no puede ser erradicada pero sí controlada- existía algún modelo especial, sobre todo orientado a la alimentación y algunos hábitos de higiene distintos al que tienen los niños urbanos que lo niños pehuenches. Entonces, uno de los objetivos era realizar un modelo predictivo de riesgo, evaluar trastornos temporomandibulares, evaluar índices de estética, erosiones y varias cosas más. Pero claramente quisimos abarcar más de lo que se podía, entonces, nuestra primera aproximación nos dejó muchas más incertidumbres que certezas.

En realidad hay una cosa transversal que es muy dolorosa a nivel país, donde los modelos de riesgo de caries están muy relacionados a la situación de pobreza, independiente de la raza, la etnia o si nos identificamos o no con un pueblo mapuche. En el fondo, eso es lo que prima a nivel país. 

¿Cuáles son los principales resultados que encontraron en la investigación? 

Lo primero, es que desde mi ignorancia como una simple mujer de ciudad, es entender cómo se organiza la comunidad pehuenche, respetar sus propios espacios, su forma de gobierno, si se puede decir así, y cómo ellos entienden la salud. Para recopilar esa información hicimos acercamientos acompañadas por Albania Acuña y Paula Huenumilla, quienes fueron las asesoras interculturales y nos hicieron las primeras aproximaciones.  Además, nosotros realizamos durante un par de meses unos talleres de mapuzugun para poder presentarnos en un idioma común y explicar que no veníamos a dar una solución, sino que con todo el respeto que las comunidades pehuenches requieren. Entonces, nos acercamos y ellos nos invitaron a un truwun para conocer a las comunidades. 

De ahí, nos planteamos como objetivos hacer una ficha clínica que pudiera relacionar algunos enfoques de riesgo como alimentación, hábitos de higiene, riesgo de caries, evaluación de caries con ICDAS (International Caries Detection and Assessment System, por sus siglas en inglés), erosiones, examen, aplicación de flúor y técnicas atraumática de restauración. También ocupamos un índice de estética oral adaptado a pacientes en dentición mixta temprana y alguna alteración que se pudiera identificar de trastorno temporomandibulares evidenciable a temprana edad.

¿Esperan continuar con la misma línea de investigación?

De todas maneras. Es algo que nos interesa bastante, tanto a la Facultad de Odontología como a la Universidad de Concepción. Además, tenemos el apoyo del Colegio de Cirujano Dentistas de Chile para hacer el patrocinio. Yo creo que se van a abrir más fondos y si no buscaremos la manera de hacerlo, porque estamos al debe en salud odontológica intercultural.